Por el corazón de la Selva Negra

El jardín de Alemania

Montes oscuros y profundos valles cargados de poesía se pierden más allá del horizonte. Guardan cascadas y lagos encantados. Cada tanto, una casa rebosante de flores en sus ventanas. Es la cuna de los famosos relojes de cuco. Todo invita a perderse entre sus pinos y a sentarse en una taberna ante un trozo de pastel de cerezas. La cultura tradicional alemana aflora exuberante en esta verde región del sur de Alemania que parece anclada en el tiempo.

La ruta en coche por la Selva Negra no sólo se nutre de fantásticos parajes naturales, pues también atraviesa ciudades como Freiburg, Heidelberg o Estrasburgo, en el noreste francés, y pueblos medievales comoGegenbach.

Una de los alicientes de este itinerario es disfrutar de la excelente carretera panorámica por la que transcurre. Por ella llegarás a la ciudad balneario de Baden-Baden pasando por Freudenstadt, que cuenta con la plaza de mercado más grande del país (mide unas cuatro hectáreas) y por el lago Mummelsee, plagado de leyendas fantasmagóricas.

Inmersas en la Selva Negra están las localidades de Triberg, Schonach y Furtwangen, volcadas en la industria artesanal de los relojes de cuco, y la turística Titisee, con su lago de origen glaciar rodeado de senderos muy apreciados por los excursionistas. Desde aquí se puede ver la cima más alta de la región, el monte Feldberg.

Freiburg tiene uno de los cascos antiguos más bellos de Alemania, franqueado por los típicos canales que discurren en paralelo a las aceras. Aquí sobresale la torre gótica de su impresionante catedral, que con sus 116 metros de altura es una de las obras de arquitectura religiosa alemana más bellas. Además, en Freiburg podrás disfrutar de su animado ambiente universitario y de los ricos vinos elaborados a partir de los viñedos que rodean la ciudad.

Más moderna es Stuttgart, potente motor económico alemán y sede de las más prestigiosas empresas automovilísticas del país. Si quieres disfrutar de unas horas de relax acude al Wilhema, un romántico parque que incluye un zoológico y un aclamado jardín botánico.

Para los que han decidido viajar con niños por la Selva Negra se recomienda la visita al Europa Park, un inmenso parque de atracciones que cuenta con diez montañas rusas, descenso de aguas bravas y diversión asegurada para todas las edades. En la romántica ciudad de Heidelberg tendrás que subir hasta el imponente castillo para regalarte la vista con la silueta del río Neckar y sus puentes.

Y como guinda a este recorrido, nada como sentarse a contemplar las exuberantes cataratas del Rin o el lago Constanza al abrigo de los Alpes.

Sugerencias para disfrutar de la ruta

  • Un paseo por el pintoresco barrio de la Petite France, en Estrasburgo, con sus agradables canales y sus casas de madera, es como un viaje al pasado.
  • Si te gustan los relojes de cuco, te admirará ver el más grande del mundo, en Schonach.
  • En el lago Titisee se puede alquilar todo tipo de embarcaciones para recorrerlo desde el interior y descansar un rato del coche.
  • Participa de la vida local paseando y cotilleando por el mercado de Freiburg, que se celebra todos los días, menos el domingo, en la plaza de la Catedral.
  • En la abadía benedictina de Alpirsbach, magnífica muestra de arquitectura cluniacense, podrás hacer algunas de las mejores fotos del viaje.
  • Los amantes de los coches tienen una cita obligada en Stuttgart: los museos de Mercedes Benz y de Porsche.
  • En la plaza de la catedral de Freiburg se celebra diariamente un mercado (excepto los domingos) donde podrás adquirir riquísimos productos locales y probar sus tradicionales salchichas.
  • Para acompañar los excelentes vinos de la región, como Trollinger, Lemberger, Riesling, Kerner o Müller-Thurgau, puedes decantarte por el dulce y típico pastel de cerezas, el Schwarzwälder Kirschtorte, o por un buen plato de jamón ahumado Schwarzwälder Schinken.

Carné de ruta

  • En avión 
    Los aeropuertos de Stuttgart, Estrasburgo (en Francia) o Basel (en Suiza) son buenas opciones.
  • En coche 
    Irún-Freiburg: 1.126 km, pasando por Burdeos, Clermont Ferrand y Belfort.
  • Longitud de la Ruta 
    286 km.

Mejor Época

Verano, aunque la primavera y el otoño son especiales por el cambio cromático de los paisajes.

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Textos cedidos por My Way Rutas en coche.