La tormenta estaba anunciada. Construir un nuevo edificio en la zona hospitalaria de Donostia a costa de quitar las escasas plazas de aparcamiento de la zona, no parecía una buena opción y así se ha demostrado. Como ya se denunció en #AQC del RACVN se han producido interminables colas para poder aparcar en las pocas plazas que todavía quedan, sin que por cierto, los accesos, fueran regulados por ningún agente de movilidad.
Pero los empleados no lo tienen más fácil M.I, sanitaria del Hospital Universitario Donostia, se ha puesto en contacto con nosotros para transmitirnos su malestar, después de que el aparcamiento privado para empleados se destinara a plazas de rotación . Dice entender que eso se haga, pero “¿y nosotras dónde aparcamos?”, se pregunta. Han habilitado una zona que hasta hace poco era un estercolero, sin vigilancia y donde había robos (la fotografía corresponde a la zona de la que nos habla M.J. situada frente a la Plaza de Toros a bastante distancia del Hospital), de momento no tenemos el anunciado autobús lanzadera, es decir, hay que coger la línea 28 o subir andando, teniendo que madrugar para poder aparcar en este pequeño espacio. “Estoy muy enfadada, el aparcamiento de enfermos, acompañantes y empleadas, nunca ha sido una prioridad ni de Osakidetza ni del ayuntamiento y la nueva situación, en el mejor de los casos durará años, es una verdadera vergüenza. Falta voluntad” . A quien corresponda