
“San Sebastián es una ciudad segura” ¿cuántas veces hemos oído de nuestras autoridades esta interesada frase?. Estaremos peor o mejor que otras ciudades, pero la realidad es que la inseguridad y los actos vandálicos con los que nos encontramos a diario los donostiarras nada tiene que ver con la tranquilidad de hace unos pocos años.
Un ejemplo evidente es la necesidad que ha llevado a los usuarios del Parking de la Concha, a la creación de una asociación, como hoy adelanta en exclusiva el RACVN, su denominación será “Asociación de usuarios del Parking de La Concha de Donostia” y tienen previsto su primer encuentro fundacional el próximo 15 de septiembre, en un céntrico hotel de San Sebastián.

Todo comenzó cuando una adjudicataria sufrió la rotura de la luna de su coche y le robaron, fue entones cuando colocó papeles en los parabrisas del resto de plazas, unas 200, con el fin de unirse contra lo que sospechaba no era un caso aislado. Entonces se descubrió el calvario que de forma individual vivían decenas de usuarios. Robos, incluso de coches, gente durmiendo, haciendo sus necesidades, situaciones de miedo en el ascensor que baja hasta la planta -5 y el robo incluso de una moto que fue sustraída dentro de una furgoneta.

La asociación pretende que ayuntamiento y concesionaria cumplan con sus obligaciones, pongan cámaras, que según denuncia una vecina, no las hay en las plantas de residentes y en definitiva, vuelva la normalidad y la tranquilidad a este céntrico aparcamiento donostiarra. Aprovecharán también para solicitar otras viejas reivindicaciones y mostrar en público el malestar, por la última ocurrencia de Movilidad de San Sebastián, la semi peatonalización del último tramo de la calle Easo, entrada directa al parking, ahora permitida solo para el transporte público, ni tan siquiera los residentes pueden pasar, teniendo que alargar el recorrido y soportar los tremendos atascos del entorno. (Más ruido y contaminación en la Zona de Bajas Emisiones, recurrida en los tribunales por el RACVN)
La habilidad de los residentes del parking a la hora de organizarse, ha puesto al descubierto una realidad que por desgracia no solo se da en este aparcamiento, empieza a ser una constante en el resto de los aparcamientos pero también en el resto de la ciudad. Una realidad silenciada por quien tiene la obligación de garantizarla. A quien corresponda