“No somos tontos, tenemos memoria”. El giro prohibido de Donostia por obras que sigue prohibido sin obras.

FOTO RACVN

M.P. . se muestra muy enfadada por lo que se ha hecho y sobre todo por lo que no se ha hecho en la cruce de las calles San Martín con Urbieta, en el centro de San Sebastián . El giro desde Urbieta a San Martín se cerró a los vehículos particulares con la excusa de las obras del Topo en el siguiente cruce, calles Urbieta con Easo, las obras acabaron hacen meses y el departamento de Movilidad, sin dar explicación alguna, mantiene cerrado el tráfico a los vehículos particulares, permitiendo el giro a los autobuses, taxis y motos e inutilizando de forma desordenada (como puede apreciarse en la fotografía), el carril diseñado en un primer momento para los vehículos particulares y todo hace sospechar que la prohibición ha venido para quedarse lo que en la práctica se traduce a una enorme vuelta que los conductores deben hacer para ir del Centro hacia el Antiguo, lo que de estar abierta la calle Urbieta, lo resuelven en poco más de 50 metros.

Ante el silencio, la nocturnidad y alevosía de Movilidad, solo cabe la especulación que en este como en tantos casos no es difícil de imaginar. Uno todos los agentes implicados, también los propios conductores de autobús reconocieron en público y en privado que el giro era un peligro, Dos; cuando se habilitó el giro, se han producido numerosos sustos, continuos accidentes y por lo menos, un atropello. Tres; la excusa de la obra, era una buena cuartada para una vez finalizada, clausurar , sin avisar este giro, Cuatro; la calle San Martín se diseñó con unos carriles más estrechos que los propios autobuses.

Y como dice M.P. “no somos tontos, tenemos memoria, sabemos lo que hicieron, lo que dijeron que iban a hacer y lo que no han hecho. En este lugar, como en tantos otros se generan a diario nuevas retenciones, mayor tiempo de desplazamiento y más contaminación, para preparar el camino de la prohibición definitiva con la excusa de las directrices europeas. Ni Europa dice que calles hay que cerrar, ni cuando, ni Europa recomienda hacer un carril más estrecho que un autobús, todo es capricho del Ayuntamiento de San Sebastián y su equipo de gobierno y sus más que cuestionadas decisiones en materia de Movilidad (el PNV, con la complicidad silenciosa e interesada del PSE y de una oposición que salvo excepciones ni se les oye, ni se les espera). Por ahora, a la espera de explicaciones esta calle está cerrada por el artículo 33; ordeno y mando y a ver si se olvidan y no se enteran. “A quien corresponda”.