El equipo de protonterapia donado por Amancio Ortega, está previsto que se instale en un nuevo edificio que se construirá entre el actual Onkologikoa y el Hospital Donostia, ocupando una parte importante del actual aparcamiento. Las obras se encuentran en fase de adjudicación y no es previsible que comiencen hasta el próximo año. No hay noticias sobre si el nuevo edificio tendrá aparcamiento subterráneo, hecho que paliaría las obras en superficie y que en función de sus dimensiones resolvería, al menos en parte, las deficiencias actuales. Hoy por hoy, el parking está situado en una parcela propiedad de Osakidetza y aunque no soluciona el aparcamiento en la zona hospitalaria, es un alivio para las miles de personas que a diario y seguramente no por gusto, se ven en la situación de utilizar el vehículo privado para llegar hasta lo que se llamó la “Ciudad Sanitaria”, hoy “Hospital Donostia”
Este asunto, es una vieja reivindicación de los guipuzcoanos y a la que el Ayuntamiento de San Sebastián, nunca ha mostrado una especial sensibilidad. Los proyectos de construcción de un parking disuasorio que además diera servicio a la zona hospitalaria, han sido numerosos pero siempre han terminado en algún cajón . No parece imposible que ambas cosas se combinasen; parking disuasorio (con la falta que le hace a la ciudad) y aparcamiento en zona hospitales, teniendo en cuenta la cercanía de la zona de Illumbe, pero para ello hay que tener voluntad.
La actual empresa explotadora del parking ya ha declinado su continuidad y según ha podido saber el RACVN, se han iniciado contactos con otras empresas del sector. Confiemos que el futuro, no sea peor que el presente. “A quien corresponda”
E