
El cambio de las rejillas de ventilación del parking de La Concha, mal instaladas en la carretera hace años, causantes de no pocos accidentes y mal recolocadas después sigue siendo el motivo del corte de carril de circulación en el final de la Avenida de la Libertad de San Sebastián, frente a La Concha, situación, que si nadie lo remedia permanecerá de esta guisa en Semana Santa. Cuando los turistas nos visiten descubrirán los desastrosos cambios de circulación de las calles del Centro y chapuzas como estas; deben saber que no es una casualidad, es lo que vivimos a diario quienes nos movemos por San Sebastián

Hace más de dos semanas publicábamos un artículo titulado “Una tarde en un cruce de San Sebastián . ¡Ver para creer!, Ese es el link https://racvn.net/a_quien_corresponda/una-tarde-en-un-cruce-de-san-sebastian-ver-para-creer/ una quincena después todo sigue igual, es como si estuvieran esperando algún material para rematar la obra. El complejo diseño del lugar lo es más complicado por el cambio de sentido de la calle, porque, sigilosamente había que hacerlo dado que la zona ya estaba dibujaba y afectada por la ZBE, algo que el ayuntamiento negó hasta el infinito. Nos engañaron y lo saben.

Entre tanto, el abandono es evidente en el lugar, vallas que se caen y nadie las coloca en su sitio (los agentes de movilidad no deben pasar por la zona , la concejala Yarza (PNV) tampoco) y un corte de carretera, con señalización deficiente, que genera enormes confusiones. En el corte coincide una parada de taxis, un estacionamiento de motos -eliminado durante las interminables obras, que en su momento hubo que rehacerlo-, la entrada y salida a uno de los principales aparcamientos de la ciudad, un carril de transporte público, un semáforo y una paso de peatones

Algunos vehículos entran en sentido contrario al aparcamiento por la salida y otros se paran en seco al llegar al laberíntico punto, generando situaciones de peligro, frenazos y bocinazos. Eso sí, nunca ningún agente. En material de movilidad en San Sebastián, casi nada sorprende. A quien corresponda.