Juan I. Viedma. ¿Ve mucha diferencia entre el fútbol actual y el fútbol de su época como jugador?
Iñigo Larrainzar. Las diferencias son grandísimas. El fútbol y la vida en general están evolucionando a pasos agigantados. Tanto en la preparación física como en la técnica, los entrenamientos, la velocidad a la que se juega, los ritmos de los partidos, los propios campos con la llegada del césped artificial o mixto… En fin, las diferencias son muy grandes con la llegada de la tecnología, ahora todo está controlado por estadísticas y ordenadores. Sabemos los kilómetros que hace un jugador, los pases buenos y los malos, las recuperaciones, etc. No sé si esto es bueno y mejor que lo de antes, pero es la realidad. Al final, todo sirve para las estadísticas.
J.I.V. Jugó principalmente como defensa central o como lateral derecho, ¿qué posición era más cómoda para usted?
I.L. He sido un jugador muy polivalente y siempre he tenido la condición de jugar en muchas posiciones. Me adaptaba bastante bien, pero reconozco que donde más he disfrutado jugando al fútbol ha sido en la posición de central.
J.I.V. Fue traspasado de Osasuna al Athletic por 200 millones de pesetas. ¿Hoy habría costado mucho más?
I.C. Pues sí, supongo. Las cantidades que se manejan hoy en día en el mundo del fútbol son enormes. Los contratos y cláusulas de rescisión actuales no tienen nada que ver con los que había hace 20 años. Las cosas van mucho más deprisa y en ‘un minuto’ se puede fichar a cualquier jugador. poniendo el dinero.
J.I.V. ¿Cómo valora el papel del RAC Vasco Navarro con sus socios?
I.C. Me parece muy bueno y fundamental, sobre todo para que los socios tengamos la enorme tranquilidad de saber que detrás de nuestra afiliación hay un gran equipo que trabaja por y para nosotros. Eso te da una tranquilidad hoy en día muy necesaria.