Noemi Navas, directora de Comunicación de ANFAC, explico que “las matriculaciones registran una ligera subida respecto del mismo mes del año anterior gracias sobre todo al canal de particulares, frente al canal de alquiladores que sigue reduciendo a más de la mitad sus compras. La escasez de stock de vehículos, tanto en turismos como en comerciales ligeros, por la crisis de los semiconductores continúa siendo una de las principales causas de este problema, agravado por la nueva situación de incertidumbre internacional, que se suma a las crisis en marcha por la pandemia y la subida del impuesto de matriculación. Solo el mercado de vehículos industriales logra mantener los números de hace un año. En esta situación no vemos que el mercado remonte con la intensidad que necesita para volver a recuperar actividad y empleo”.
Raúl Morales, director de comunicación de FACONAUTO, indicaba que “el dato de crecimiento es engañoso, porque estamos comparando con uno de los peores febreros de la serie histórica, como fue el de 2021, y también porque ahora se está matriculando la bolsa de coches que se vendieron a finales del año pasado. La realidad es que las matriculaciones siguen más de un treinta por ciento por debajo de las cifras prepandemia y que la falta de stock es la circunstancia que más está impactando. Las ventas de coches de febrero también confirman que el contexto, al que ahora hay que incluir la guerra de Ucrania, tampoco está contribuyendo ahora mismo a que haya un cambio de tendencia, lo que nos está abocando a que se alargue el estancamiento del mercado. Hay que evitar que esta situación se cronifique, porque hace que nuestro sector sea menos competitivo y que no contribuya a la recuperación del país.”
Según la directora de Comunicación de GANVAM, Tania Puche, “el mercado sigue registrando volúmenes mensuales que se sitúan más de un 35% por debajo de los niveles prepandemia. Destaca, sobre todo, el comportamiento extremadamente débil de las empresas alquiladoras; y es que la crisis global de microchips las pone contra las cuerdas porque, aunque tienen músculo financiero para comprar, no tienen oferta para aprovisionarse de flota. Si se esperaba que las tensiones en la cadena de suministro fueran mejorando a lo largo de 2022 y fueran liberando parte de la demanda retenida, la invasión de Ucrania por parte de Rusia tumba las previsiones, teniendo en cuenta que ambos países abastecen de materias primas para la fabricación tanto de vehículos como de dispositivos tecnológicos”.
Fuente: Nota de prensa ANFAC, FACONAUTO y GANVAM.